Las peras son muy queridas en todo el mundo y pueden consumirse tal cual o usarse en recetas cocinadas. Se sabe que estas frutas maduran rápidamente y, por lo tanto, si desea disfrutarlas durante períodos más largos, simplemente congélelas. ¿Cómo? Tastessence te dirá cómo congelar peras.
Prueba para comprobar la madurez
Para tener una idea aproximada de qué tan madura está la pera, presione suavemente el cuello de la pera donde termina el tallo. Si la piel cede, indica madurez. Este método se usa porque las peras normalmente maduran al revés.
Jugosa, crujiente, ácida y dulce, una pera es todo esto y algo más, no es de extrañar que sea una fruta muy popular. Las peras no solo saben bien, sino que también brindan varios beneficios para la salud. Se sabe que son una buena fuente de fibra y vitamina C. Hay alrededor de 3000 variedades conocidas de peras que, salvo algunos meses (de mayo a julio), generalmente están disponibles durante todo el año. El único inconveniente, si se puede llamar así, de las peras es el hecho de que perecen con bastante rapidez una vez maduras. Naturalmente, esto exige que encontremos formas de preservarlos para que puedan disfrutarse durante todo el año. Puedes hacer mermeladas o simplemente congelarlas para conservar su sabor durante más tiempo.
Si planea congelarlas, recuerde elegir peras maduras pero no demasiado maduras. Como se mencionó anteriormente, estas frutas pueden perecer rápidamente una vez que están maduras, así que tenga cuidado al elegir porque no quiere que sean blandas. Congelar las peras puede ser un poco complicado debido a su tendencia a volverse marrón.Para evitar eso, ciertos ácidos vienen al rescate. Cuáles son esos ácidos y cómo ayudan a congelar las peras, averigüémoslo.
Nota: solo recuerda lavar bien las peras y verificar que no tengan moho.
Formas de congelar peras
1 En un almíbar
в–¶ Lavar las peras. Puedes congelarlos con o sin piel. Si desea quitar la piel, hágalo antes de comenzar el resto del procedimiento.
в–¶ Cortar la pera en rodajas y quitar el corazón, las semillas, el tallo o cualquier parte marrón.
в–¶ Tome una cacerola y agregue azúcar al agua en una proporción de 3:1 (3 tazas de azúcar por 1 taza de agua). Remueve y lleva el almíbar a ebullición.
в–¶ Agregue las peras en rodajas y déjelo hervir durante 2 a 3 minutos. Retire la sartén del fuego y deje que la mezcla se enfríe.
в–¶ Agregue ½ cucharadita. de jugo de limón o Fresh-Fruit por cada litro de almíbar.
в–¶ Vierta la mezcla en bolsas o recipientes para congelar. Asegúrate de dejar alrededor de una pulgada de espacio en la parte superior para permitir que la mezcla se expanda.
в–¶ Rellene el espacio superior con un pergamino desmenuzado o papel encerado sobre las rodajas para que las peras queden sumergidas en el almíbar.
в–¶ Selle las bolsas o recipientes con un mínimo de aire adentro, escriba la fecha y guárdelos en el congelador.
Consejo: utilice este método si desea utilizar las peras en platos crudos o frescos, como un plato de frutas. Además, este método funciona mejor con peras que están muy firmes.
2 ¡Seca!
в–¶ Este método es bastante fácil y no consume mucho tiempo. Todo lo que necesita son peras, azúcar, una bolsa/recipiente para congelar y una bandeja/plato para hornear galletas.
в–¶ Lava la pera, pélala y córtala en rodajas del grosor deseado.
в–¶ Coloque las rebanadas en una bandeja para hornear galletas o en un plato.
в–¶ Espolvorea uniformemente un poco de azúcar blanca sobre ellos. Déjalos a un lado durante 10 a 15 minutos para que el azúcar se filtre.
в–¶ Coloque el plato o la bandeja para hornear galletas en el congelador durante 3 horas. Asegúrate de que ninguna de las rebanadas se pegue entre sí.
в–¶ Después de que se congelen, retire la hoja y coloque todas las rebanadas en una bolsa para congelar.
в–¶ Mientras sella la bolsa o el recipiente, extraiga todo el aire que pueda y luego séllelo.
Consejo: este método funciona mejor para las peras que se requieren en platos cocinados como batidos o pasteles. Agregue ½ cucharadita. de ácido ascórbico a 3 cdas. de agua fría. Agregue esta mezcla a las rebanadas de pera y luego congélelas en la bandeja para hornear galletas.
Consejos útiles
♦ Las peras también se pueden conservar con zumos de frutas naturales como el de manzana o uvas blancas.
♦ Vigile cualquier signo de moho. Si ve alguno, corte la parte infectada o deseche la pera por completo.
♦ Si elige peras no tan dulces, use el método del almíbar o agregue un poco de jugo.
♦ Las peras congeladas con el método seco tardan más en descongelarse que las congeladas en almíbar. Además, las peras en almíbar quedarán más blandas.
♦ No es necesario agregar ácido ascórbico cada vez que utilice el método seco. La adición de ácido ascórbico no altera el sabor, pero solo el color de la pera se vuelve marrón. Si no le importa que las peras se pongan marrones, puede congelarlas sin el ácido.
♦ Congelar las peras en una solución evitará que las rebanadas se “quemen por congelación”.