La cuerda de saltar es un ejercicio de alto impacto que mejora su resistencia cardiovascular. La coordinación de manos y pies también aumenta a medida que cronometra sus saltos para que coincida con sus oscilaciones. Estos saltos necesitan una base estable y eso comienza con tus pies. Puede saltar con o sin una cuerda, pero el American Council on Exercise recomienda usar zapatos de apoyo para reducir el riesgo de lesiones.
Video del día
Cross Train
ACE recomienda los cross trainers como la zapatilla óptima para saltar la cuerda. Buddy Lee, el autor del libro, "Jump Rope Training" está de acuerdo. Los zapatos de entrenamiento cruzado ofrecen una superficie firme y de apoyo para proteger los huesos pequeños en los pies y estabilizar los tobillos. Sus rodillas y caderas requieren esta amortiguación adicional para reducir el riesgo de lesiones por el movimiento de salto repetitivo.
Soporte aeróbico
Si no puede encontrar un zapato de entrenamiento cruzado o este tipo de calzado no es cómodo, ACE sugiere usar un calzado aeróbico. Los zapatos aeróbicos son típicamente más ligeros que los cross-trainers, pero aún ofrecen soporte. Revise su zapato para una caja de dedo reforzado y uno con relleno adicional en la parte delantera del pie. El relleno ayuda a absorber el impacto. Pruebe su zapato en la tienda antes de comprarlo. Pretende saltar la cuerda y sentir si el zapato tiene suficiente relleno debajo de las puntas de los pies.
Custodia conjunta
Los zapatos ofrecen protección para los tobillos, rodillas, caderas y espalda. Cuando combina sus zapatos con una superficie de apoyo, sus articulaciones están más protegidas. Lee recomienda una superficie de goma, un piso de madera suspendido o campos hechos de césped artificial como los mejores lugares para practicar la cuerda de saltar. Además, rompa sus zapatos gradualmente y comience con menores cantidades de tiempo antes de saltar durante un período prolongado.
Una forma de variedad
Use sus zapatos y use la forma adecuada para mantenerlo libre de lesiones. Al saltar, mantenga las rodillas ligeramente flexionadas y la espalda recta. Los saltos deben ser bajos al suelo y lo suficientemente altos como para que la cuerda pase bajo sus pies. Varíe sus saltos para reducir las lesiones por uso excesivo. Por ejemplo, salta hacia delante y hacia atrás, de lado a lado, en un pie, en un salto de gato o en un patrón de fondo.