El colon, o intestino grueso, tiene la función importante de procesar desechos en el sistema digestivo para permitir evacuaciones sanas y fáciles (consulte la Referencia 4). Los movimientos intestinales pobres son sintomáticos de un colon no saludable, que puede atribuirse a una dieta deficiente y toxinas ambientales. Las toxinas de los alimentos pueden absorberse en el torrente sanguíneo en lugar de eliminarse en presencia de paredes del colon dañadas. Las mejoras en la dieta pueden ayudar a mejorar la salud del colon y ayudar en la prevención de trastornos digestivos como el síndrome del intestino irritable y el cáncer de colon (ver referencia 5).
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Verduras crucíferas
De acuerdo con los Centros de nutrición de cáncer de América, el consumo de vegetales crucíferos está asociado con un menor riesgo de cáncer, incluido cáncer de colon (ver referencia 5). Las verduras crucíferas contienen fitonutrientes que combaten el cáncer, en particular los glucosinolatos que contienen azufre. Llene su plato con brócoli, coliflor, col china y col rizada para una buena salud del colon.
Almidones seguros
Los almidones resistentes son carbohidratos que pasan por alto la digestión en el intestino delgado y entran al intestino grueso casi en su forma original. Estos almidones actúan para promover un buen crecimiento bacteriano en el intestino que puede ayudar a aliviar los trastornos digestivos, como la enfermedad inflamatoria intestinal y los riesgos de cáncer. Las hortalizas de raíz como el ñame, la batata y las calabazas de invierno contienen almidones resistentes como los cascarilla, el arroz y las legumbres (ver referencia 2).
Alimentos ricos en probióticos
Los probióticos son bacterias amigables que ayudan a mejorar el equilibrio de la microflora intestinal buena a mala en el intestino (ver referencia 3). Puede ayudar a reparar la mala salud intestinal comiendo alimentos ricos en probióticos como chucrut, miso, yogur o kimchi (ver referencia. Un estudio en la revista Journal of Pediatric Gastroenterology Nutrition sugiere que los sujetos con síndrome de intestino irritable podrían beneficiarse del uso de probióticos (ver Referencia 7).
Suplementos y hierbas
La vitamina A, glutamina y aceite de pescado pueden ayudar a prevenir y tratar la enfermedad intestinal irritable para mejorar la salud del colon. Además, hierbas como la cúrcuma tienen propiedades antiinflamatorias que pueden ayudar a curar el intestino pobre salud al reducir la inflamación (ver referencia 6). La American Cancer Society cita que la curcumina, un ingrediente activo de la cúrcuma, ha mostrado efectos anticancerígenos en estudios de laboratorio con animales. Se necesita más investigación sobre su efecto en humanos (ver referencia 8).