Hay muchas razones para una cesárea, incluido un bebé que es demasiado grande para caber a través de la vagina de manera segura, con trabajo de parto lento, una infección como el VIH o sufrimiento fetal. Lamentablemente, ciertos riesgos para la salud están asociados con el procedimiento quirúrgico y los medicamentos utilizados durante un parto por cesárea.
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Problemas respiratorios
Los bebés que nacen a través de una cesárea pueden desarrollar problemas respiratorios y respiratorios como la taquipnea. Esta condición se produce porque el líquido pulmonar que normalmente se exprime a medida que el bebé pasa a través del canal de parto permanece en los sacos pulmonares. Esto hace que sea difícil para el bebé inhalar oxígeno de manera adecuada, lo que hace que respire más rápido o irregularmente. Un bebé también puede inflamar sus fosas nasales, gruñir o gemir. También puede notar que su piel se repliega hacia las costillas rápidamente mientras respira.
Ictericia
Los bebés que nacen por cesárea pueden estar sujetos a ictericia, especialmente si el bebé era prematuro. Esta condición hace que la piel y los ojos se vuelvan amarillentos. Se desarrolla cuando el pigmento, llamado billirrubina, se acumula dentro de la sangre. El hígado de un bebé recién nacido puede tener dificultades para procesar esta billirrubina. Aunque esta condición no lastima a un bebé, puede causar daño cerebral grave si no se trata.
Puntuaciones bajas de Apgar
La prueba de Apgar es la primera prueba que se le da a un bebé recién nacido. Califica el pulso, la respiración, la apariencia, el nivel de actividad y la respuesta de la mueca del bebé. Desafortunadamente, un bebé que nace por cesárea ya podría haber estado en apuros o no haber sido estimulado de la misma forma en que lo habría estado si hubiera tenido un parto vaginal. Esto puede hacer que obtenga una puntuación baja en el Apgar. Un médico necesitará controlar su condición o proporcionar atención de emergencia adicional.
Efectos secundarios de la anestesia
La anestesia utilizada durante el procedimiento quirúrgico de una cesárea puede afectar a algunos recién nacidos. Debido al sedante, el bebé puede ser lento o inactivo. Esto puede dificultar que un bebé se prenda durante la lactancia, lo que puede crear dificultades de alimentación y frustración. Además, la American Pregnancy Association afirma que la anestesia puede causar que la frecuencia cardíaca del bebé varíe o que su respiración se deprima.