Los electrolitos son partículas cargadas que ayudan con el movimiento del fluido dentro y fuera de las células del cuerpo. Aseguran que los entornos ácido-base y el agua estén bien equilibrados para garantizar que todos los procesos fisiológicos puedan funcionar sin problemas. Las alteraciones en el equilibrio electrolítico tienen efectos adversos. Sodio, potasio, hidrógeno y bicarbonato son ejemplos de los electrolitos corporales más importantes.
Video del día
Electrolitos y equilibrio del agua
Cuando la sal se disuelve en el agua, se divide en dos componentes con carga eléctrica llamados electrolitos. Algunos electrolitos se encuentran dentro de las células del cuerpo, y otros se encuentran afuera. El agua tiende a seguir el movimiento de los electrolitos dentro y fuera de las células para mantener un equilibrio óptimo. La mayoría de los fluidos corporales se encuentran fuera de las células. Si entrara demasiada agua en las celdas, podrían explotar. Si no es suficiente, las células podrían colapsar. Las condiciones tales como vómitos, diarrea, quemaduras, sudoración e incluso medicamentos pueden causar una pérdida excesiva de electrolitos. Esto puede ser dañino. Mantener una ingesta adecuada de líquidos es esencial para evitar situaciones médicas peligrosas.
Efectos de sodio
El sodio es un electrolito que se encuentra fuera de las células. Es principalmente responsable del volumen de líquido allí, pero también juega un papel en el equilibrio ácido-base. Las cantidades apropiadas de sodio son importantes para la transmisión nerviosa y la contracción muscular, también. Los riñones filtran el sodio del torrente sanguíneo y devuelven la cantidad necesaria al torrente sanguíneo para un funcionamiento corporal óptimo. Las ingestas dietéticas de referencia establecen el nivel adecuado de ingesta de sodio a 1, 500 miligramos por día para individuos entre las edades de 19 y 50 años y 1, 300 miligramos por día para los 51 a 70 años de edad. Las personas mayores necesitan incluso menos: 1, 200 miligramos por día.
Funciones de potasio
El potasio reside dentro de las células del cuerpo y ayuda con el equilibrio de líquidos y electrolitos y la contracción nerviosa y muscular. Mantener el ritmo cardíaco y la presión arterial adecuados depende del funcionamiento adecuado del potasio. Las ingestas bajas de potasio en la dieta se asocian con presión arterial elevada; altas ingestas previenen esto. Debido a que las frutas y verduras son buenas fuentes de potasio, consuma de cinco a nueve porciones de estos cada día para alcanzar una ingesta adecuada de 4, 700 miligramos por día.
Chloride's Job
Chloride funciona con sodio para mantener el equilibrio normal de líquidos y electrolitos como un electrolito extracelular. El cloruro también se encuentra como parte del ácido clorhídrico, un compuesto necesario para la digestión adecuada de los alimentos. Las deficiencias de cloruro son raras, pero los vómitos intensos, la diarrea o la sudoración pueden causar toxicidad. Asegure una hidratación adecuada para prevenir esto. La ingesta adecuada de cloruro es de 2, 300 miligramos por día para las personas de entre 19 y 50 años, 2 mil miligramos por día para los que tienen entre 51 y 70 años y 1, 800 miligramos por día para cualquier persona mayor.
Hidrógeno y Bicarbonato
Los electrolitos de hidrógeno juegan un papel en el equilibrio ácido-base del cuerpo. Cuando están presentes en altas concentraciones, los fluidos corporales son muy ácidos. Para facilitar el funcionamiento fisiológico adecuado, este estado ácido debe ser neutralizado por sustancias conocidas como tampones. El bicarbonato funciona como un buffer, neutralizando las condiciones ácidas en el cuerpo. Se produce en todos los fluidos celulares junto con la secreción del páncreas durante la digestión.