La metformina, o glucophage, es un medicamento oral para la diabetes que se receta comúnmente para controlar los niveles de azúcar en la sangre. Este medicamento hace que sea más fácil para su cuerpo absorber la glucosa disponible en el torrente sanguíneo. La metformina es generalmente un medicamento seguro; sin embargo, algunos pacientes pueden experimentar acidosis láctica, que produce dolor muscular, dificultad para respirar, frecuencia cardíaca lenta o desigual, debilidad, mareos y dolor de estómago. Además, la metformina puede causar pérdida de peso como un efecto secundario, que puede ser beneficioso si está tratando de perder peso.
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Paso 1
Programe una cita con su médico para determinar si la metformina es un medicamento apropiado para el control de la diabetes y la pérdida de peso. Asegúrese de informarle a su médico sobre otros medicamentos que está tomando, en particular los medicamentos relacionados con la diabetes. Traiga al menos una semana de grabaciones de azúcar en la sangre antes y después de las comidas.
Paso 2
Tome metformina con una comida, ya sea que se lo recete una vez al día o dos veces al día. Evite comer alimentos altos en calorías y grasos mientras toma metformina. Concéntrese en consumir más frutas, verduras, granos integrales y nueces. Controle sus niveles de azúcar en la sangre después de comer.
Paso 3
Beba un vaso lleno de agua cada vez que tome metformina. También lo hará sentir lleno y reducir sus antojos de comer.