La fibra consiste en los carbohidratos que no se descomponen o absorben en el tracto digestivo. Debido a que aumentar su fibra dietética puede beneficiar a su cuerpo de muchas maneras, muchos fabricantes han comenzado a agregar fuentes de fibra, como la inulina, a sus productos para aumentar el contenido de fibra. Esto puede beneficiar su tracto digestivo y puede ayudarlo a sentirse satisfecho por más tiempo. Sin embargo, consumir inulina puede causar algunos efectos secundarios leves, aunque generalmente no son serios.
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Inulina
La inulina es un tipo de fibra soluble que se puede encontrar en muchas frutas y verduras, como el ajo, el trigo, el plátano y la cebolla. La inulina pertenece a una clase de compuestos conocidos como fructanos, que se clasifican como fibras porque no son absorbidos por el tracto digestivo humano. Aunque la inulina se produce de forma natural en algunos alimentos, también se puede extraer de la raíz de achicoria y utilizarse como aditivo para aumentar la cantidad de fibra presente en algunos alimentos.
Problemas digestivos
El hecho de que la inulina no sea absorbida por su cuerpo no significa que no cause ningún efecto secundario. Un artículo de 2010 en el Journal of the American Dietetic Association examinó los efectos secundarios del consumo de inulina en voluntarios. Las personas que consumen inulina ocasionalmente experimentan flatulencia e hinchazón. Notablemente, estos efectos secundarios fueron más severos para los voluntarios que consumieron 10 g de inulina, que fue la dosis más alta.
Efectos secundarios del gas
Aunque la inulina no se descompone por las enzimas digestivas, no pasa por el tracto digestivo sin cambios. Como explica un artículo de 2005 en el British Journal of Nutrition, la inulina funciona como un prebiótico, lo que significa que sirve como fuente de alimento para las bacterias que viven naturalmente en sus intestinos. Este es en realidad uno de los beneficios de la inulina, ya que estas bacterias son importantes para la salud de su tracto digestivo. Por otro lado, cuando estas bacterias degradan la inulina, producen gas, lo que produce flatulencia e hinchazón.
Prevención de efectos secundarios
Una forma de reducir los efectos secundarios del consumo de inulina es comenzar con un nivel bajo y aumentar gradualmente la cantidad que consume. Comenzar con una dosis alta de inulina puede ser difícil para su tracto digestivo y puede aumentar los efectos secundarios. Al comenzar con una dosis más baja, le da tiempo a sus intestinos y bacterias para adaptarse a la inulina, lo que puede minimizar el gas producido.
