Los queloides son un tipo de cicatriz que forma un crecimiento de tejido carnoso que sobresale de la piel. De acuerdo con el American Osteopathic College of Dermatology, se forman cuando los tejidos conectivos llamados fibroblastos y células de la piel se multiplican en exceso, creando tejido extra. Los queloides a menudo son hereditarios, y las personas con tonos de piel más oscuros corren más riesgo. Si usted está en riesgo de desarrollar queloides, podría desarrollar uno debido al daño en la piel causado por las elecciones de estilo de vida, como los tatuajes, señala el sitio web del Servicio Nacional de Salud (NHS).
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Identificación
Lo primero que debe hacer es identificar si su cicatriz elevada es una cicatriz queloide o hipertrófica. Los hipertróficos son más comunes que los queloides, ya que las personas de todos los colores de la piel pueden desarrollarlos. Un hipertrófico no crecerá tan grande como un queloide y también es mucho más fácil de eliminar. En realidad, finalmente se aplanará solo, señala AOCD.
Prevención
Si sabe que es propenso al desarrollo de queloides y acaba de hacerse un tatuaje, puede tomar precauciones para evitar que se desarrolle. Una vez que el tatuaje tenga un mes, puede usar almohadillas de gel de silicona como apósito de presión en el sitio y dejarlas encendidas las 24 horas del día. El sitio web de NHS señala que no hay mucha evidencia de que esto funcione, sin embargo, por lo que recomienda la cinta impregnada de esteroides, aplicada 12 horas al día, como una alternativa.
Reducción
Debido a la alta posibilidad de que los queloides vuelvan a crecer, especialmente en aquellos con antecedentes familiares, una reducción lenta puede ser el mejor método para usted. DermNetNZ observa que la criocirugía utiliza una aplicación de aerosol o hisopo de algodón de nitrógeno líquido. Esto descompone las fibras de tejido. Combinado con inyecciones mensuales de la hormona cortisona, un queloide puede disolverse por completo dentro de los seis meses, señala AOCD.
Extirpación
Existen varias técnicas disponibles para detener el recrecimiento después de la extirpación quirúrgica del queloide del tatuaje. Se ha demostrado que la radiación de ortovoltaje o haz de electrones, que penetra superficialmente, aplicada al sitio de la cicatriz detiene el rebrote en el 85 por ciento de los pacientes. Las inyecciones de cortisona y fármacos alfa-interferón directamente en el sitio también han tenido éxito para detener el rebrote.
Consideraciones
El tratamiento de queloides es muy difícil y el rebrote es común, señala el sitio web de NHS. Si tiene antecedentes de queloides o se trata de su familia, lo mejor es evitar tatuajes y piercings de joyería. Consulte a su médico para el diagnóstico de cualquier cicatriz elevada que tenga. Los queloides son tumores benignos y no pueden volverse cancerosos, señala AOCD.