Las bebidas gaseosas azucaradas aumentan el nivel de azúcar en la sangre y agregan varios cientos de calorías a su dieta, sin hacer que se sienta satisfecho. Soda es solo un tipo de refresco; esta categoría también incluye ponche de frutas, bebidas de frutas aromatizadas, bebidas energéticas, té endulzado y limonada. Los refrescos bajos en azúcar pueden endulzarse con edulcorantes artificiales, que incluyen acesulfamo de potasio, aspartamo, sacarina y sucralosa, o edulcorantes naturales bajos en calorías, como la stevia y su derivado rebiana-A. Estas opciones bajas en azúcar pueden ayudarlo a ahorrar calorías y evitar cambios dramáticos en su nivel de azúcar en la sangre, pero pueden confundir las señales de hambre de su cuerpo y presentar riesgos para la salud.
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Beneficios potenciales
Si tiene una afección que requiere que limite su consumo de azúcar, como diabetes, los refrescos bajos en azúcar son una alternativa positiva a bebidas con alto contenido de azúcar porque tienen un impacto mínimo en los niveles de azúcar en la sangre. Las bebidas gaseosas bajas en azúcar generalmente son muy bajas en calorías, por lo que también pueden incluirse como parte de un régimen de pérdida de peso.
Puede provocar que coma más
Los edulcorantes artificiales en bebidas gaseosas bajas en azúcar activan los centros de recompensa en el cerebro que reaccionan al azúcar, pero no proporcionan ninguna energía sustancial en la forma de calorías Como resultado, la capacidad de su cerebro para regular el consumo de energía puede verse comprometida. Un estudio de 2014 publicado en el American Journal of Public Health mostró que las personas que consumen refrescos bajos en azúcar o sin azúcar, en promedio, ingieren más calorías de alimentos sólidos que las personas que consumen bebidas azucaradas.
Consideraciones de seguridad
La Administración de Alimentos y Medicamentos de EE. UU. Ha aprobado que todos los edulcorantes no azucarados utilizados en bebidas sin alcohol con bajo contenido de azúcar sean seguros para el consumo. El grupo de vigilancia del Centro para la Ciencia en Interés Público señala, sin embargo, que aún puede experimentar efectos secundarios por consumir estos productos y que se desconocen los efectos a largo plazo en la salud.