Si tiene herpes oral o genital, su médico puede recomendarle un tratamiento con un suplemento de lisina. Aunque es necesaria una investigación adicional, la lisina puede ayudar a reducir la replicación del virus del herpes en el cuerpo, lo que puede ayudar a reducir los síntomas de los brotes. A pesar de los beneficios para la salud de este suplemento, tomar demasiada lisina puede ser perjudicial para su salud. Debe conocer los síntomas y los efectos secundarios de la sobredosis de lisina antes de comenzar a tomar este suplemento.
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Síntomas desconocidos
La dosis diaria recomendada de lisina para adultos es de 3, 000 a 9,000 mg, según el Centro médico de la Universidad de Maryland. Si toma más que la lisina recomendada, puede estar en riesgo de una sobredosis de lisina. En los humanos, los síntomas de una sobredosis de lisina no se conocen ni entienden completamente. No se cree que una sobredosis de lisina produzca complicaciones médicas fatales. Sin embargo, busque atención médica de emergencia si cree que ha tomado demasiada lisina.
Cálculos biliares o colesterol alto
En estudios en animales, demasiada lisina puede causar cálculos biliares o colesterol alto, advierte el Sistema de Salud de la Universidad de Michigan. Aunque el colesterol alto generalmente no causa síntomas notables, los cálculos biliares pueden provocar dolor abdominal, fiebre, ictericia, náuseas, vómitos, hinchazón o heces de color arcilla. Si presenta alguno de estos síntomas mientras toma suplementos de lisina, consulte a su proveedor médico lo antes posible.
Calambres abdominales y diarrea
Si consume de 15 a 40 gramos de lisina por día, puede estar en riesgo de desarrollar calambres abdominales o diarrea, explica el UMHS. La diarrea provoca deposiciones frecuentes y acuosas que pueden ir acompañadas de hinchazón, dolor de estómago o pérdida del apetito. Póngase en contacto con su médico si experimenta diarrea crónica, ya que estos síntomas pueden aumentar su riesgo de deshidratación.
Contraindicaciones
Informe a su médico de cualquier problema de salud que pueda tener antes de tomar suplementos de lisina. Evite el tratamiento con lisina si padece una enfermedad hepática o renal, a menos que así lo indique un profesional médico. No se cuenta con información sobre la seguridad de la lisina durante el embarazo y las mujeres embarazadas o lactantes deben evitar el uso de este suplemento.
