Pocas cosas frustran a los bailarines tanto como las piruetas. Una pirueta perfecta comienza con un plie sólido, conectado a tierra, continúa con una rotación suave, o dos o tres, y concluye con un aterrizaje limpio y silencioso. En los días buenos, todo fluye y te sientes como un millón de dólares. En días malos, nada parece hacer clic. Los ejercicios preparatorios básicos y algunos consejos de expertos en torneado pueden eliminar las conjeturas de las piruetas.
Video del día
Jugando con sus propioceptores
Un buen equilibrio es la clave para giros cerrados y limpios. Puedes trabajar para mejorar tu equilibrio haciendo ejercicios básicos de propiocepción, ejercicios que mejoran la sensación de posición de tu cuerpo en el espacio. Uno de los ejercicios de propriocepción más comunes y básicos es la postura de una sola pierna. Intenta pararte sobre una pierna y sostener la postura durante 60 segundos o más. Mejora la intensidad agregando un releve, levantando y bajando lentamente los talones con total control. Si estás alerta, es probable que notes que tu cuerpo hace muchos pequeños ajustes en un esfuerzo por mantener tu postura. Para que el ejercicio sea más desafiante, cierra los ojos, inclina o gira la cabeza de un lado a otro o mueve los brazos en diferentes direcciones. Alternativamente, experimente parándose con una sola pierna sobre una superficie inestable, como una pequeña almohada hinchada o una tabla de equilibrio.
The Core Connection
Al girar, un núcleo firme le ayuda a mantenerse levantado y sobre su base de apoyo, ya sea la planta de su pie o la punta de su zapato de punta. Los bailarines profesionales, y los docentes, médicos y fisioterapeutas que trabajan con ellos, se han vuelto cada vez más conscientes de la importancia del entrenamiento básico, tanto para mejorar la técnica como para prevenir lesiones. Una rutina básica básica que incluye una combinación de tablones frontales y laterales, puentes, abdominales estándar, abdominales para bicicleta y superman puede aumentar la fuerza en los abdominales, la espalda y las caderas. Ya sea que realice giros únicos o múltiples, la fortaleza en estas áreas es crucial si desea piruetas frescas y estables.
Conoce tus pies
Cuando te das la vuelta, es posible que estés al tanto de tus brazos y los lados de tu espalda. Probablemente entiendas, y sientas, cómo te ayudan a impulsarte. Pero no subestimes la importancia de lo que sucede en el terreno. Debido a que sus pies y tobillos también son jugadores importantes, es importante desarrollar fuerza en los músculos que ayudan a su función. Para trabajar sus tobillos, muchos bailarines recurren a la banda de resistencia de confianza, una herramienta barata, liviana y altamente versátil. Para trabajar los pequeños músculos intrínsecos del pie, use los pies descalzos y los dedos de los pies para recoger objetos pequeños y transferirlos a un recipiente o balde.
Ser mental
Un buen giro implica una conciencia mental.Siempre comience con una preparación sólida y sólida para que sus caderas y hombros estén al frente y cree un plié estable, sugiere Amy Brandt en "Pointe Magazine". Intenta usar imágenes mentales, como imaginarte a ti mismo como un sacacorchos humano, atornillarte en el suelo mientras tu cabeza permanece levantada y tu torso "crece" más alto. Trate de pasar la pierna lo más rápida y bruscamente posible y observe cada giro por separado y claramente para evitar mareos.