La nutrición adecuada es un componente importante en la recuperación del uso excesivo de drogas y alcohol. Todos los sistemas corporales se ven afectados por el uso de drogas. Para que tenga lugar la curación, debes construir una sólida base nutricional. Según Webster Place Recovery Center, es más probable que ocurra una recaída cuando tiene hambre, está enojado, solo o está cansado. Alimentarse a sí mismo con alimentos saludables aborda un aspecto de la prevención de recaídas.
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Daño realizado
Las drogas dañan el corazón y el sistema circulatorio al contribuir al desgaste muscular debido a la ingesta deficiente de proteínas. Un hígado con exceso de trabajo se hincha, impidiendo la producción de bilis y filtrando y causando falta de apetito. La irritación en el páncreas causa hinchazón que puede bloquear el flujo de enzimas en el estómago y causar dificultades digestivas y diabetes. Los riñones se inflaman con infecciones frecuentes y una mayor producción de agua, lo que causa la pérdida de nutrientes. El sistema nervioso central y el hipotálamo se agravan, afectando la memoria, la capacidad de pensamiento y la coordinación. Las membranas mucosas en el esófago, el estómago y el recto se irritan y se sedan. El estómago está irritado, mostrando un mayor riesgo de úlceras. Los intestinos se ven afectados por la desaceleración o la aceleración del tiempo de tránsito, lo que aumenta el riesgo de absorción deficiente y ciertos cánceres. Los niveles sanguíneos de muchos nutrientes también se ven afectados por las drogas y el alcohol.
Recovery Diet
Alcohólicos Victorious recomienda la siguiente dieta de recuperación, tomada de "Nutrition in Recovery" por Margaret Soussloff, MS y Cara Zechello, RD Utilice la Pirámide alimenticia de la USDA como guía de cómo preparar comidas bien equilibradas, que incluyen tres bocadillos y tres comidas al día. Las mini comidas pequeñas y frecuentes ayudan a mantener la energía constante y el estado de ánimo incluso durante el día. Beba café descafeinado y té de hierbas para disminuir la cafeína, lo que puede causar desequilibrios energéticos. Coma frutas y verduras frescas y granos integrales junto con frijoles y productos de granos. Limite la carne roja, ya que es más difícil de digerir. Elimine o minimice los alimentos que contienen azúcar y cafeína, y tenga en cuenta el azúcar escondido y la cafeína en alimentos como el cacao, los condimentos y los medicamentos de venta libre. Esfuércese por una dieta que contenga un 25 por ciento de proteína, un 45 por ciento de carbohidratos y un 30 por ciento de grasa para obtener el mejor equilibrio.
Neurotransmisores
Todas las drogas se dirigen al sistema de recompensa del cerebro directa o indirectamente al inundar los circuitos con dopamina. La dopamina es un neurotransmisor ubicado en áreas del cerebro que regulan la emoción, el movimiento, la cognición, los sentimientos de placer y la motivación. Los alimentos y los suplementos nutricionales pueden suministrar aminoácidos, los componentes básicos de la dopamina.Al proporcionar al cuerpo una gran cantidad de aminoácidos específicos, puede reducir los antojos, minimizar el riesgo de recaída y aumentar las sensaciones de bienestar. Uno de esos aminoácidos, L-triptófano, se encuentra en claras de huevo, espirulina, bacalao del Atlántico y soja cruda. Las sales de L-5 hydroxytryptophan chromium se encuentran en pequeñas cantidades en pavo y queso y en suplementos hechos de las semillas de griffonia simplicifolia. L-glutamina está contenida en carne, lácteos, frijoles, remolachas y espinacas. La L-fenilalanina proviene de la leche de vaca y de cabra, mientras que la L-tirosina se encuentra en los quesos, la espirulina, la proteína de soya, las claras de huevo y el salmón.
Otras deficiencias
Uno de los nutrientes más importantes necesarios para la recuperación es un grupo de vitaminas B llamado complejo B. Ser deficiente en estas vitaminas puede causar desde irritabilidad hasta psicosis. Las vitaminas B se encuentran en el arroz integral, los granos integrales, los vegetales de hojas verdes como la mostaza y la col rizada, la levadura de cerveza, las nueces y las semillas, los lácteos, el pescado y la carne. Los ácidos grasos Omega-3 ayudan a aliviar las emociones negativas y a desarrollar células cerebrales saludables. Se encuentran en el salmón y las sardinas y se pueden tomar como suplementos. Consulte con su médico antes de agregar cualquier suplemento nutricional a su dieta.