El aceite de girasol se produce extrayendo el aceite de las semillas y las cabezas de las plantas de girasol, que luego se refina y se filtra. Los fabricantes a menudo promueven el aceite de girasol como beneficioso para perder peso, ya que contiene grasas predominantemente insaturadas. Sin embargo, también hay muchos aspectos negativos del aceite de girasol, que no lo beneficiarán si está buscando perder peso.
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Calorías
Para perder peso, necesita quemar más calorías de las que consume. Para calcular aproximadamente cuántas calorías debe consumir cada día para perder peso, multiplique su peso corporal en libras por 12. Esto significa que una persona de 150 lb debe comer aproximadamente 1, 800 calorías por día. Una cucharada de aceite de girasol contiene alrededor de 120 calorías. Teniendo en cuenta que la mayoría de la gente usará un toque liberal al cocinar o preparar aderezos, el aceite de girasol podría agregar fácilmente 240 calorías extra a su comida, lo que significa que tendrá que vigilar sus calorías cuidadosamente durante el resto del día.
Grasas
El aceite de girasol contiene principalmente grasas poliinsaturadas, o PUFA, que a menudo están relacionadas con el aumento de la salud del corazón. Sin embargo, los PUFA en el aceite de girasol son principalmente ácidos grasos omega 6. La mayoría de las dietas occidentales contienen demasiada grasa omega 6 y muy poca cantidad de omega 3. Según el nutricionista Jonny Bowden, esto puede provocar problemas de salud, aumento de la acumulación de grasa y aumento de peso.
Procesamiento
El aceite de girasol ha crecido en popularidad en los últimos 50 años, ya que es barato de producir y tiene una larga vida útil. Durante el proceso de fabricación, el aceite está expuesto a altas temperaturas, lejía y otros productos químicos, y se refina en gran medida, dejándolo desprovisto de muchos de los nutrientes presentes en las semillas de girasol. Esto hace que el aceite esté altamente oxidado, lo que puede causar daño celular e inflamación dentro del cuerpo.
Alternativas
Al cocinar a altas temperaturas, el aceite de coco es su mejor opción. Es un aceite altamente estable, que consiste en grasas triglicéridas de cadena media, que pueden ser beneficiosas para la salud y no se vuelven rancias cuando se exponen a altas temperaturas. Para cocinar a baja temperatura y aderezos para ensaladas, use aceite de oliva virgen extra, que es rico en grasas monoinsaturadas.
